Acné, problema de la piel que afecta a millones de personas
Muchas personas ligan su autoestima y felicidad a su aspecto personal, principalmente del rostro, así que la aparición del acné puede ser causa de depresión, aislamiento y ansiedad.
Ser feliz las 24 horas del día es prácticamente una utopía; sin embargo, procurarnos ser felices la mayor parte del tiempo. Con la belleza sucede lo mismo, la seguridad puede construir o destruir un buen momento, así que está en nosotros construir la confianza y empoderar nuestro aspecto, a pesar de las imperfecciones que surjan.
A nivel global, el acné es uno de los problemas de la piel que afectan a millones de personas, ya que se reporta que uno de cada 10 lo sufre, colocándolo como el padecimiento de la piel número ocho, en el top ten de las que tienen mayor prevalencia.
Éste aparece cuando los poros de la piel se tapan por exceso de aceites y células muertas, lo que causa una infección y proliferación de bacterias. Además del rostro, afecta pecho, hombros y espalda en forma de espinillas, puntos negros, granitos o bultos grandes y dolorosos que se forman debajo de la piel.
Los reportes actuales muestran que el acné se refleja en niños desde los 7 años de edad, sumado a la gente joven con cambios hormonales y glándulas sebáceas hiperactivas que producen aceite extra y tapan los poros hasta formar una mezcla donde aparecen las bacterias, surge la inflamación, enrojecimiento y pus.
Los adultos de hasta 80 años también presentan acné, y esto es debido a la vida moderna donde la prisa hace que se tenga una higiene pobre sobre la piel, exceso de estrés, mala alimentación, mayor exposición a agentes de contaminación y el uso comprometido con objetos electrónicos que se rozan con el rostro varias veces durante el día.
En cuestión de géneros, aparece en los hombres de formas más severas y duraderas, aunque con las mujeres es más periódico, debido a cambios hormonales ligados al ciclo menstrual.
Cuando se habla de imperfecciones no se toca un tema banal, sino un problema que deja marcas físicas y emocionales, ya que muchas personas ligan su autoestima y felicidad a su aspecto, principalmente al rostro, así que la aparición y descontrol del acné puede ser vínculo entre depresión, aislamiento y ansiedad.
La forma en la que este tema de salud nos afecta también está en evolución, ya que con el surgimiento de las redes sociales y la moda de las selfies, estamos expuestos más tiempo a cámaras fotográficas y a la necesidad de “lucir bien”.
La seguridad y autoestima adolecen mucho más, la presión social es mayor. Hay personas con acné que para no exponer su rostro entre amigos, prefieren no salir más y pierden la convivencia básica. El impacto emocional y social del acné es tan grande, que estudios han demostrado que es posiblemente tan devastador que puede causar diabetes, asma o epilepsia*.
La frase podría parecer trillada, pero es cierto que los dueños de nuestra felicidad somos cada uno de nosotros. Es por ello que solamente depende de ti tomar una actitud positiva para darte bienestar y empoderarte.
La presión social siempre estará, pero evitar o enfrentar un problema es la disyuntiva para vivir mejor y darle poder a nuestra belleza, o bajar nuestro ánimo y no encontrar una solución.
Los problemas de belleza a menudo se agravan debido a que los pacientes consultan fuentes poco confiables para salir del paso. Ir con un profesional médico se vuelve opción cuando las condiciones de la molestia se vuelven más severas.
El acné también ha evolucionado, por lo que encontrar una solución “moderna” es una tarea en la que muchos desisten. Los productos para barros, espinillas, puntos negros o cicatrices simplemente se convierten en una colección de inservibles.
¿Cómo podemos asegurarnos de que el dinero que invertimos en productos para el acné no se está yendo a la basura; que esos productos pueden seguirle el paso al acné moderno y que realmente serán efectivos?
Dermatólogos líderes a nivel mundial, quienes recientemente acudieron al simposio internacional New Skin Order: The Changing Face of Acne organizado por el Pond’s Institute, revelaron que en la actualidad las personas que sufren de acné se están enfrentando a diversos factores que causan estrés a la piel como son la urbanización los cambios en la dieta, la contaminación y el incremento en la presión social, los cuales tienen un gran impacto en la forma en la que experimentan el acné.
Por lo cual los científicos del Pond’s Institute desarrollaron el Nuevo Tratamiento Anti-acné Pond’s Acne Solution con tecnología clínicamente comprobada Lock+Clear y el poderoso activo antiacnéThymo-T, una combinación anti-acné única formulada con aceites de tomillo y pino. Los ensayos clínicos realizados mostraron una reducción significativa del acné, tanto en hombres como mujeres, desde el tercer día.
Su solución no es cubrir o disimular el problema, sino ir al fondo del mismo y así acabar con él.
*Mallon E, Newton JN, Klassen A et al. The quality of life in acne: a comparison with general medical conditions using generic questionnaires. Br. J. Dermatol.140,672-676 (1999).