El ejercicio impulsa la efectividad de la insulina
En periodo vacacional, las personas que viven con diabetes deben estar especialmente alertas a los cambios en su rutina con la finalidad de que sus niveles de glucosa no se vean afectados.
Estudios científicos han confirmado que los tres pilares del cuidado de la diabetes son alimentación balanceada, actividad física constante y tratamiento médico. Cuando una persona es diagnosticada con diabetes, es común que se preocupe por cómo afectará su estilo de vida y cómo podrá evitar repercusiones en un período vacacional o de recreación, ya que muchas veces implica cambio en su rutina y su plan de cuidado.
Al respecto la Educadora en Diabetes, Jacqueline Alcántara de BD Ultra Fine comenta que “cuando una persona es diagnosticada con diabetes puede llegar a ser un impacto muy fuerte emocionalmente, pero mientras mayor entendimiento haya del padecimiento, más se empodera de su condición. Lo mismo sucede con el tratamiento. Con disciplina, educación y constancia, acompañado del médico tratante y profesionales de la salud, logrará su meta de manera segura”.
Una insulinización temprana ayuda a evitar o retrasar las complicaciones que una diabetes fuera de control implica, ya que está demostrado que la insulina es el tratamiento óptimo para el cuidado de la glucosa en sangre. Una técnica correcta de inyección acompañada de ejercicio potencializa sus beneficios, ya que fomenta una mejor metabolización.
Es importante mencionar que no todas las personas pueden realizar el mismo tipo de ejercicio, por ello debe ser asistido por su equipo de profesionales de la salud para que se lleve a cabo con éxito y no sea abandonado en el proceso. Aunque una recomendación general es hacer ejercicio 4 veces a la semana durante 30 minutos para que exista un beneficio, se deben consultar con el médico tratante y profesionales de la salud las particularidades de cada quién.
Para disfrutar de este período vacacional sin repercusiones, Jacqueline Alcántara comparte las siguientes recomendaciones:
- Planear las actividades así como las comidas por adelantado. Estar preparados reduce los márgenes de error y de improvisación.
- Respetar los horarios de comida y de medicación.
- Monitoreos constantes de glucosa para conocer la situación en que se está y cómo prodecer.
- Organizar actividades que impliquen actividad física para evitar el sedentarismo, por ejemplo: juegos al aire libre, paseos, caminatas, etc.
- Para una técnica de inyección correcta de insulina, utilizar agujas cortas y ultra finas, de 6mm en jeringa convencional y 4mm para plumas. El uso de herramientas seguras, únicas y confiables ayudarán a que la experiencia sea más precisa.
- Expertos recomiendan agujas para pluma de 4mm con 5 biseles en la punta, conocidas como tecnología PentaPoint, ya que facilita su deslizamiento por la piel, minimizando la sensación de punción, lo que fomenta la adherencia al tratamiento.
- Si se va a estar fuera de casa, llevar consigo todos los insumos necesarios en un estuche con gel para que la insulina se mantenga a temperatura fresca y se tengan todas las herramientas a la mano cuando sea necesario ocuparlas.
- Ligado al punto anterior, llevar la cantidad de insumos suficientes para el tiempo en que se va a estar fuera y de acuerdo con los horarios de aplicación. Ahorrará el problema de necesitar algo y no encontrarlo cuando se pretenda conseguirlo.
- Cargar siempre una receta médica con todas las instrucciones necesarias para evitar complicaciones estando fuera de casa, por ejemplo: al viajar en avión, al estar en otra ciudad, si el paciente presenta algún malestar.
- Beber abundante agua simple o de frutas naturales baja en azúcar, como limón o jamaica.
- Utilizar calzado cómodo y que de preferencia no sea nuevo. Es preciso cuidar el pie diabético.
A manera de conclusión, Alcántara indica que “el tratamiento para la diabetes en todas sus áreas (alimentación, ejercicio, medicación) debe ser personalizado ya que no existen dos casos iguales. Todas las recomendaciones deben ser ajustadas de acuerdo con las necesidades de cada paciente y es el médico tratante junto con el equipo de profesionales de la salud quienes están capacitados para hacerlo. Los períodos vacacionales y de esparcimiento son para disfrutar, si se mantiene un adecuado control de la diabetes no habrá ningún problema”.
Imagen: Alexander Mils/Unsplash.