Rutina para proteger tu piel de los daños del invierno
Ahora que estamos en los meses de clima frío, notamos algunos cambios en nuestra piel. El ambiente helado y los bajos niveles de humedad son la combinación perfecta para el aire seco, lo que equivale a la piel seca. No dejes que los duros efectos del invierno afecten tu piel ¡Tenemos cinco pasos para ayudarte a mantener su mejor aspecto!
Paso 1: Hidrata
Claro, la mayoría de nosotros conoce los beneficios del agua potable. Sin embargo, con las condiciones secas que trae esta temporada, nuestra piel necesita tanta hidratación como sea posible. Entre el duro clima invernal y los calentadores de interior de las casas y edificios, la piel está siendo drenada de su humedad natural durante todo el día. La deshidratación induce a una piel escamosa y lo hace más propensa a las arrugas. Beber mucha agua ayudará a reemplazar la mayor parte de la humedad perdida y promoverá una piel radiante y clara.
Paso 2: Limpia
Cuando cambian las estaciones del año, su régimen de piel también debería cambiar. ¡Durante los meses de invierno, el ácido hialurónico se convertirá en tu nuevo mejor amigo! El ácido hialurónico atrae la humedad de la piel para darle una tez más brillante y de aspecto más joven. No solo hidrata, sino que ayuda a reducir la aparición de líneas finas y arrugas. Evita los limpiadores espumosos y, en su lugar, encuentra un limpiador que elimine suavemente la suciedad y retenga la hidratación.
DERMA E Limpiador suave hidratante es la forma ideal de obtener una cara fresca durante esta temporada. Las vitaminas A y E trabajan para limpiar eficazmente la piel de la suciedad y las impurezas que pueden acumularse en la superficie. Al mismo tiempo, este limpiador de ácido hialurónico suaviza e hidrata la piel, preparándolo perfectamente para el siguiente paso en su rutina de cuidado de la piel.
Paso 3: Exfolia
Aunque amamos nuestros pequeños remedios de belleza, durante el frío deberíamos darles un pequeño descanso. Cuando la piel ya está seca, es más propensa a la irritación y al agrietamiento. Reduce el uso de un cepillo facial y en su lugar usa un exfoliante cremoso e hidratante que contenga ácido hialurónico, para eliminar suavemente la suciedad y la piel muerta. Recuerda que debes exfoliar una vez por semana o una vez cada dos semanas.
Paso 4: Hidrata
Con este clima, que a veces puede ir acompañado de viento fuerte, nuestra piel sufre mucho estrés y daños. Una buena manera de proteger el rostro es recubriéndolo con un humectante rico en nutrientes que contiene ácido hialurónico. Esto repondrá la piel seca y deshidratada con humedad duradera durante todo el día.
Paso 5: Sueros y mascarillas
Para evitar sentir que tu cara tiene “kilos de productos”, el uso de un suero es un recurso eficaz de hidratación. Los sueros son delgados, livianos y ayudan a retener la humedad. Una buena máscara de arcilla es una superestrella de hidratación que rejuvenece la piel con ricos nutrientes para revelar una piel más suave y flexible.
Con información de Derma E
